Cuando se contrata un sistema de alarma para el hogar la empresa lo instalará teniendo en cuenta una serie de parámetros fundamentales. Para elegir la ubicación de los detectores de movimiento, es necesario tener en cuenta cuáles son los puntos de acceso empleados de forma más frecuente por los delincuentes. Del mismo modo que será necesario reparar en qué puntos presentan menor resistencia a la instrucción, evidentemente, dichos puntos deberán protegerse. Desde Viserco queremos destacar algunos de los puntos más habituales para colocar los detectores de movimiento:
- Puerta principal: Es el primer punto en el que se piensa para la localización de un detector de movimiento, el punto de principal acceso a una vivienda. Se trata de un lugar lógico, de hecho, es el principal punto de acceso para los ladrones. En un 34% de los robos en viviendas, el acceso se produce por la puerta principal, lo cual tiene sentido, ya que de esta manera llaman menos la atención.
- Ventanas: Se trata de otro punto frecuente empleado por los amigos de lo ajeno para penetrar en propiedades privadas. Además, de los detectores de movimiento que alerten sobre la presencia de intrusos, se pueden incluir detectores de vibración que también activen la alarma ante la rotura de un cristal.
- Puertas adicionales: Al igual que ocurre con la puerta de acceso principal, será necesario reforzar la seguridad de estos elementos. Las puertas laterales y traseras suelen ser más débiles que la principal. Se trata de puertas como las que encontramos para acceder a una terraza o un patio, suelen responder al mismo diseño que las ventanas. Por ello habrá que reforzar la seguridad con un buen sistema de cerradura y tener en cuenta que son puntos donde colocar los sistemas de detección de movimiento. Del mismo modo que en las ventanas, es adecuado colocar detectores de vibración que emitan la señal pertinente en caso de rotura del cristal.
- Ventanas superiores: En las viviendas de más de una planta se colocarán sistemas de detección de movimientos en las plantas superiores. Si bien es cierto que solo un 2% de las intrusiones tiene lugar por las plantas superiores. Realmente es difícil pasar desapercibido para el ladón si tiene que encaramarse a una escalera para acceder a la vivienda. En cualquier caso, también se deben proteger las plantas superiores del riesgo de intrusión.
